Naranja deshidratada

La naranja deshidratada es una joya cítrica que al perder su contenido de agua, concentra su esencia en finas rodajas de intenso sabor y aroma. Este proceso de deshidratación preserva la vivacidad de sus notas ácidas y dulces, resultando así, un ingrediente versátil y altamente valorado al momento de infusionar tés, infusiones o tisanas. Al añadirla, la naranja deshidratada infunde un carácter zesty (sabor o aroma fuerte y picante, generalmente cítrico) lo que eleva la experiencia gustativa con su matiz tan distintivo. Además de su sabor, aporta una fragancia que transofrma una simple taza de té en una bebida aromática y revitalizante. Este ingrediente no solo enriquece el perfil sensorial de las infusiones, sino que además, añade un toque visual muy estético y refinado.

El uso de la naranja en el té es una tradición milenaria originada en China, en donde se descubrió que la combinación de cítricos con té, además de mejorar el sabor, aportaba beneficios para su salud como la mejora de la digestión y fortalecer su sistema inmune. Con el tiempo, esta práctica se adhirió a otras culturas como la europea, al exportar naranjas desde el Mediterráneo y el Caribe durante la época colonial. Hoy día, la naranja deshidratada es un ingrediente esencial en muchas mezclas de té, apreciada tanto por su aporte gustativo como por su evocadora historia que conecta continentes y tradiciones.